La historia de Andalucía comienza con su primera civilización con tribus de África mezclándose con los griegos, quienes principalmente colonizaron el noreste de España y los celtas. Alrededor del 500 a.C. los tartesos se sometieron a los cartagineses que reforzaron su dominio en esta zona de España. Andalucía se hizo muy rica gracias a la floreciente minería de metales preciosos y a la agricultura, la capital fue Corduba (la actual Córdoba).
En Roma, que dependía completamente de Andalucía para su aceite de oliva, surgieron más tarde varios senadores e incluso emperadores de esta región (Trajano y Adriano).
El declive del Imperio Romano puso a Andalucía bajo el control de los vándalos que emigraron a Túnez después de la desintegración del Imperio Romano de Occidente.